Falta de protocolos y viajes a Buenos Aires sin cuarentena eran algunas de las irregularidades que sucedían en la empresa.


La semana pasada se desató un brote de coronavirus en una pesquera ilegal de la ciudad, la cual fue clausurada. Una empleada denunció que no se respetaban los protocolos y que el dueño viajaba a Buenos Aires sin realizar cuarentena.
“Trabajábamos todos cuando teníamos que ir y era un lugar muy precario, tenía un comedor para 20 personas, no había nada, ni distanciamiento. Estábamos todos ahí, a la deriva. En el mismo comedor te cambiabas, tomabas el té. Un desastre. Los reclamos no fueron nunca escuchados. Si querés venir vení, sino no vengas, decía el dueño”, dijo Noelia Vivas, trabajadora del lugar.
“Yo trabajaba en la pesquera con 20 personas más, desde el día en que nos enteramos concurrimos algunos para hacernos el hisopado. Hay compañeros que no han podido hacérselo todavía”, agregó.
Asimismo, Noelia contó que “semanas anteriores ya había compañeros mal. El dueño se sentía mal hace tres semanas y él no se aisló para nada. El dueño viajaba a Buenos Aires, si ellos no viajaban nosotros no cobrábamos. Esto es totalmente en negro”.
“Nos enteramos el 11 y esa semana anterior había compañeros que ya sentíamos síntomas de la gripe. Y uno de lo compañeros más valiente decidió ir al médico. Este brote para mí que ya lo teníamos dos semanas antes”, manifestó.