La justicia también ordenó la confiscación de todas las propiedades del acusado, en una decisión que podría complicar aún más las relaciones entre Beijing y el país norteamericano
La relación se complicó tras la detención de Meng Wanzhou, directora financiera de la empresa tecnológica china Huawei, el 1 de diciembre de 2018 a petición de Estados Unidos por una supuesta violación de las sanciones a Irán.
Pocos días después, las autoridades chinas detuvieron a los canadienses Michael Spavor y Michael Kovrig por presuntas «actividades que ponen en peligro» la seguridad nacional del país asiático.
El pasado mes de junio, la Fiscalía de Dandong, en la provincia nororiental china de Liaoning, presentó cargos contra los dos canadienses de «recopilar, proveer y vender secretos de Estado a fuerzas extranjeras».
Por otro lado, el pasado mes de mayo, una jueza canadiense dictaminó que el proceso de extradición a Estados Unidos de Meng Wanzhou puede seguir adelante.
Mientras que Meng se encuentra en libertad condicional en su mansión de Vancouver a la espera que los tribunales canadienses decidan la solicitud de extradición de Estados Unidos, Spavor y Kovrig están en paradero desconocido en China y no se han hecho públicos detalles sobre su caso.
Estos casos, a su vez, se enmarcan en una pugna entre Pekín y Washington por la supremacía digital, y China cree que el arresto de Meng es parte de la estrategia de Estados Unidos para desprestigiar y tratar de contener a Huawei como empresa puntera global.
(Con información de EFE y Europa Press)